La palabra evolución cada vez está más diluida reemplazándola por cambio o Transformación, sobretodo esta última, todo parece tener que transformarse. Procesos, relaciones, organizaciones, cultura… todo debe transformarse. Y para mover elementos tan grandes como organizaciones o tan complejos como procesos debemos trabajar los aspectos más pequeños que los conforman. Y en este caso, la base de toda transformación se inicia en los individuos.
Ya puede pasar que nos cambien los sistemas, los edificios, el código de vestimenta… o sea (el continente) que si no cambiamos nosotros (el contenido) no habrá transformación alguna.
Ahora bien, ¿Cuáles son los motivos por los que verdaderamente cambiamos? Por los que a través de nuestra evolución, nos transformamos nosotros y por consiguiente al entorno? Identificamos varios:
Iniciado por una razón: Debo hacerlo. Existe un objetivo/ una meta, quiero llegar a algo y sólo puedo hacerlo a través del cambio, actuando de manera distinta a como lo venía haciendo. O también, hay un dato cuantificado que me mueve a cambiar, por ejemplo: la competencia está creciendo en número de clientes, mientras que yo estoy bajando,
Guiado por un deseo: Quiero hacerlo, . Soy consciente que mi situación actual no es la que espero. Deseo, busco anhelo ser otra cosa, llegar más lejos o recorrer otro camino
Iniciado por una emoción: Necesito hacerlo, algo en el interior, lo grita. Quiero ser distinto a los demás, sé que debo distanciarme de la media. Pienso distinto, sé que podemos hacer de otra manera, lo siento, lo noto
Provocado por una necesidad: El sector en el que he trabajado años, ha desaparecido. No puedo hacer otra cosa, no tengo otra elección, que cambiar. Hazlo o…. muere
El cambio de verdad, la transformación REAL de las cosas, empieza por cada uno de nosotros, cuando hemos llegado al punto en el que lo que estábamos haciendo ya no es válido nunca más. Da igual quien nos esté gritando, nuestra voz interior o el entorno (mercado, profesión,..), da igual.
Quiero, debo, necesito, tengo que hacerlo. No importa el comienzo, lo importante es dónde llegamos.
Philip, it’s so good to keep up with our awesome discussions!